jueves, 6 de febrero de 2014

Ahora.

Ahora la luna se duerme sin ni si quiera despedirse. Su luz se va y soy yo quien ilumina mi mundo. Sus pisadas se borran tras mi sombra. Ahora aunque el sol se jubile y la inmensidad devore ciudades fantasma. Aunque tu cama sólo sea un dormitorio inundado por los recuerdos y mis ganas la almohada sobre la que te dejas caer para hacer volar a las mariposas color pesadilla, volveré con la lluvia a borrar la soledad, que tanta inundación hace mella, chico.

Ahora el silencio se rompe a mitad de tu llanto.
Ahora con la soga al cuello el amanecer derrama su llanto.
Ahora se pintan con besos los espacios en blanco. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario